El universo trabaja bajo un orden perfecto. En el no hay accidentes ni casualidades. Todo tiene su razón de ser. Sin leyes... ¡nada funcionaría!. Así como en nuestra vida personal y dentro de nuestra sociedad hace falta orden, de igual manera en el Universo.
Las leyes universales funcionan por si solas, valen para todos por igual y en todos los rincones del universo. Cuando vivimos en sintonía con las leyes universales, vivimos en armonía con el TODO. Estamos en armonía con nosotros mismos, nuestra familia, nuestros amigos, nuestra sociedad, nuestro trabajo, nuestra mente, nuestras emociones, nuestra salud y por supuesto, con la vida misma. Es entonces cuando podemos vivir una evolución continua y un crecimiento permanente.
Al conocer el funcionamiento del universo, la inseguridad y el miedo dejan de regir nuestra vida porque al conocer las leyes, ya sabremos los efectos que estamos creando. El vivir respetando las leyes universales, es vivir en sintonía con el universo, significa vivir protegidos, es como si estuviéramos dentro de una gran burbuja que nos envuelve en amor y nos protege de nuestro entorno, y de cualquier agresión o peligro. Al vivir en sintonía, conocemos el propósito de nuestra vida y logramos comprender el sentido profundo de los sucesos que vivimos. Hechos que anteriormente eran injustos o incomprensibles, toman un matiz en nosotros y lejos de producir dolor, nos quedan como enseñanza para superarnos y trascender.
Las leyes universales funcionan por si solas, valen para todos por igual y en todos los rincones del universo. Cuando vivimos en sintonía con las leyes universales, vivimos en armonía con el TODO. Estamos en armonía con nosotros mismos, nuestra familia, nuestros amigos, nuestra sociedad, nuestro trabajo, nuestra mente, nuestras emociones, nuestra salud y por supuesto, con la vida misma. Es entonces cuando podemos vivir una evolución continua y un crecimiento permanente.
Al conocer el funcionamiento del universo, la inseguridad y el miedo dejan de regir nuestra vida porque al conocer las leyes, ya sabremos los efectos que estamos creando. El vivir respetando las leyes universales, es vivir en sintonía con el universo, significa vivir protegidos, es como si estuviéramos dentro de una gran burbuja que nos envuelve en amor y nos protege de nuestro entorno, y de cualquier agresión o peligro. Al vivir en sintonía, conocemos el propósito de nuestra vida y logramos comprender el sentido profundo de los sucesos que vivimos. Hechos que anteriormente eran injustos o incomprensibles, toman un matiz en nosotros y lejos de producir dolor, nos quedan como enseñanza para superarnos y trascender.
El transgredir las leyes universales, tendrá una repercusión en nuestra vida, seamos concientes o no de ello Si elegimos continuar así, viviremos entonces a través de la desunión y el deterioro de nuestra persona. Nuestra vida se verá estancada sin ver progreso alguno de nuestros proyectos. Nos encontraremos desprotegidos y vulnerables a influencias externas, toda agresión, peligro y sufrimiento será cotidiano para nosotros.